GUILLERMO CUÉLLAR BARANDIARÁN
Autor de septiembre 2016
Guillermo
Joaquín Cuéllar Barandiarán
Antropólogo graduado de la
primera promoción en una universidad salvadoreña, con un postgrado en
Antropología Social y un Master of Science en Metodología de la Investigación
Científica. Cuenta además con estudios universitarios en filosofía, teología y
ciencias de la comunicación en universidades de México y Centroamérica. Conferencista
invitado por los departamentos de humanidades y teología de las universidades
norteamericanas: Xavier de Cincinnati, Susquehanna de Pennsylvania, Carthage de
Wisconsin, Wartburg de Iowa, Augsburg y St. Olaf de Minnesota, Santa Clara,
California. Ha publicado ensayos y artículos en revistas especializadas
nacionales: Identidades, Ciencia-Cultura-Sociedad, Realidad, El Salvador
Investiga, Pensamiento Propio, Tendencias. Es autor de 2 obras de investigación
cultural: “Salarrué en el periódico
«PATRIA»” y “Mangoré: El Cacique de
la guitarra en El Salvador”. La primera ha sido publicada bajo el sello
editorial de la Secretaría de Cultura de la Presidencia; la segunda se
encuentra en proceso de edición e impresión. En la actualidad funge como
miembro del cuerpo multidisciplinar de la Dirección Nacional de Investigaciones
en Arte y Cultura de la Secretaría de Cultura de la Presidencia. Además es
catedrático de la Escuela de Antropología de la Universidad Tecnológica de El
Salvador. Aparte de su dedicación académica y desempeño docente universitario,
el quehacer musical ha acaparado su empeño profesional durante los últimos 45
años. Su trayectoria en este terreno abarca desde la membresía en coros
(Woodstown High School, New Jersey, USA, y Universidad Centroamericana UCA, El
Salvador) hasta su participación en los grupos más representativos de la Nueva
Canción salvadoreña: Sembrador (1975), Mahu Cutah (1977), Yolocamba I Ta
(1980), Banda Tepehuani (1986), Cuestarriba (1994), Exceso de Equipaje
(1996-2010). Durante los años 1999 a 2006 dirigió el Coro universitario de la
Universidad Tecnológica de El Salvador. Es compositor de reconocidas obras
musicales, tales como: “Misa Popular Salvadoreña” (1980); “Canciones para una
Nueva Vida” (1987); “Misa Mesoamericana” (1994); “Dos Alas” musicalización de poemas del poeta nacional salvadoreño, Alfredo
Espino (2000); Cancionero histórico de las comunidades eclesiales de base de El
Salvador (2012).